lunes, febrero 27, 2006

Donde no se puede

El sábado estaba sentado en mi banco favorito, junto a la playa, en un viejo paseo que durará poco, pues prometen una remodelación para que esté acorde con los Tiempos del Cemento. Leía la novela de Safran Foer que todavía me dura, está bien pero hay algo que no me termina de gustar, en fin. Y entonces me sorprendió en tales menesteres mi viejo profesor de literatura del instituto, Laureano, que tuve en 2º BUP y en COU. Ahora está jubilado, me dice, lo hizo con 62 años, y menos mal, porque no están los tiempos como para dar clases en los institutos, tal y como se ha puesto el alumnado. Estuvimos hablando un rato, primero de mi situación, y luego de un paseo (para bajar su colesterol, me dice), vino otra vez y se sentó a mi lado, y seguimos la conversación. De literatura, sobre todo, la gran pasión de ambos: pero claro, él sigue siendo el profesor, pese a los años transcurridos, y que yo me he formado, y mucho, y en literatura anglosajona estoy mucho más puesto que él. Él domina ante todo la literatura española, of course, la poesía, y también la literatura francesa, porque como todos los intelectuales de su generación, lo suyo es el afrancesamiento. Dijo que la novela es para cuando uno tiene una cierta experiencia, por lo que no entiende esta moda de jóvenes novelistas lanzados al estrellato como si fueran deportistas o artistas pop. La novela sale a partir de los cuarenta años, cuando uno ha vivido y ha leído mucho. De alguna forma, me consuela saber esto, y saber que sólo Le Grand Meaulnes es una gran novela escrita por un joven, que todo lo demás no merece la pena. Pensar que la gran novela que uno lleva dentro puede seguir cociéndose durante varios años más, es algo que alivia, que te da ánimos. Nos despedimos, luego de hablar él de Torrente Ballester y sus dos obras maestras (Don Juan y Saga/ fuga de JB), que yo no he leído, tal vez porque todavía no estoy preparado. También me dijo que tiene una web, Las nueve musas, sobre literatura y lengua, con un apartado dedicado al cómic también, una página que se está trabajando él solito, lo cual tiene mérito para alguien de su generación. Me dio mucha alegría este encuentro, sobre todo porque también me animó con fuerza a irme de aquí (sus hijos están todos lejos, en Madrid, París, etc.), porque este lugar no es posible, ni siquiera para el turismo. Hay lugares donde una mente como la mía no puede vivir, este lugar es venenoso y me está haciendo mucho daño. Andalucía entera es algo imposible, que hay que dejar atrás (mañana, por cierto, se celebra el bienaventurado Día de Andalucía).

En fin, que se va otro mes, y me quedaré esperando abril, el buen tiempo, que las nieves y el frío se alejen por fin.

3 Comments:

Blogger elzo said...

Precioso el relato.

5:42 p. m.  
Blogger Portnoy said...

Creo que comenté algo sobre la novela de safran Foer cuando la leí... no es muy agradable ver como personas más jóvenes publican una novela cuyo mayor mérito sea una supuesta originalidad... que no se ve por ninguna parte.
Tal vez el malestar que sientes ante la novela sea esa sensación de "ya leido" que tiene toda la historia. No hay nada nuevo en Todo está iluminado. Hay mucho potencial, cierto, pero en el fondo es un copypaste adornado con el situacionismo de Irving-Auster... en fin, un camelo... no desagrada pero no convence.
¿es eso?
Un saludo, Lukas.
Cuídate.

11:51 a. m.  
Blogger lukas said...

Pues ya terminé la novela, aprovechando que ayer era fiesta aquí, y la verdad es que es un poco como dices: SAfran Foer era muy joven cuando la escribió para saber del amor y otros asuntos que requieren tiempo, experiencia en suma. ASí que se basta con los relatos de los mayores, pero claro, todo queda como de segunda mano. La historia del poblado judío, polaco entonces y ucraniano ahora, es típica del realismo mágico un poco demodée. La del abuelo de Alex, ya leída, claro. Lo que empieza de forma humorística acaba de forma trágica algo tremendista. Y quedan muchos hilos sueltos, lo cual no sé si será bueno o malo, pero me quedó la sensación de no haber comprendido del todo, o ¿y qué más? En fin, eso que dice algún crítico, que la gran novela de su generación ya está escrita, nanay.

10:32 a. m.  

Publicar un comentario

<< Home