jueves, septiembre 21, 2006

Otoño sombrío

Mucha tristeza nunca le humilló
pero temía el hondo pozo oscuro
que él envolvió en sus aguas cenagosas.
Mucho haloperidol; pinchazos de antabús
probó electroterapia veinte veces
y salió disparado hacia una vida
que ahora ya no recuerda: quince años
hasta que llegó el litio: quince años
perjudicando a todos los que amaba
pues gastó su dinero y el ajeno
en alcohol en viajes y en delirios.
Pero el litio llegó y está en su sangre
y ahora es su compañero de por vida
hasta la oscuridad o la luz total.


Llega el litio, José Agustín Goytisolo; de Las horas quemadas, Lumen, 1996.

Ayer, mientras rebuscaba entre mis recortes, y ordenaba los de literatura, encontré uno con la noticia, el 20 de marzo de 1999, de la muerte de José Agustín Goytisolo, "el poeta popular", y para ilustrar la noticia (no se decía abiertamente que había sido un suicidio, sino que el poeta "se desplomó desde su piso en Barcelona", y se veía en la foto su cuerpo yacente en la calle tapado por una manta o sábana), ponían este poema, que me encanta. Detrás, algunos perfiles de gente que lo conocía, una foto de él y Paco Ibáñez, el que puso música a su poema más popular, Palabras para Julia. Uno no tendría que husmear en cosas del pasado, me parece..., antes bajé al sótano y fue peor, vi un álbum de fotografías en donde me veía en mi anterior vida: un pequeño horror. Y luego, en los sueños, se me aparece gente del pasado, o sea, fantasmas...

3 Comments:

Blogger Sin_Organos said...

lukas,

los fantasmas equilibran, compensan nuestro orden diurno, represor..que te voy a contar...
asi que gracias a que soñamos. aunque la verdad es que hay mañanas...que contrataría a un bladerunner para que se cargara a los replicantes:-))))))

*
jose agustin es de lo mejor, el y valente; goytisolo, pizarnik, y valente; bueno: gamoneda, pizarnik, goytisolo y valente, bueno: celan......
un beso :-)

- barcelona en nùvols-

lita

que guapos estáis en la foto, sobretodo ella...

10:25 p. m.  
Blogger lukas said...

Gracias, Lita, por tus acertados comentarios...

El otro día también leía sobre la tormentosa relación de Robert Hughes con sus dos mujeres, Sylvia PLath primero, y luego Assia no-sé-qué, que también se suicidó, unos años después, encendiendo el gas y llevándose a su hija (y de RH) consigo, lo cual fue un acto muy egoísta de su parte. Los poetas no son gente fácil, al contrario, pero sus poemas viven en nosotros, los que quedamos.

Un saludo desde el solitario mar, ahora, ¡por fin!

10:55 a. m.  
Blogger Sin_Organos said...

lukas,

sé que compartimos el mismo mar, pero el tuyo es muy especial para mi, asi que sonríele un poco, ahora sin guiris...
no puedo decir lo mismo de la invasion de boberia guirilandia que inunde esta ciudad....

sobreviviremos...:-)
un beso

sinorg

lita

9:41 p. m.  

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