martes, octubre 02, 2007

Al final del día

al final del día pongo la radio, están hablando y suena alguna canción entre medias, se trata de un poema que ha sido puesto en música por alguna gente, el poema es de Luis García Montero y se llama Aunque tú no sepas, que pertenece a su libro Habitaciones separadas. Un músico en el estudio, ahora no recuerdo su nombre, también escribió una canción basándose en él, Pequeño Cine Estudio, del que no se habla para nada en la canción, de ahí la extrañeza del presentador, y el tipo explica después que es un cine de Madrid, un cine secreto, que sólo conocen unos pocos cinéfilos, yo entre ellos, en donde se puede soñar despierto con los mejores autores. Y luego escucho el tema por Enrique Urquijo, con esa voz llorona e inconfundible, en un directo que hace llorar a los corazones solitarios. Y el poema queda resonando en mi cabeza toda la noche. Y antes en otro programa en otra radio, escucho un poema inédito de Antonio Gamoneda, y luego él mismo, con su voz ya rota, leyendo ese mismo poema que habla de la última transparencia.

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2 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Tengo la suerte de que el grandísimo poeta sea amigo de mis padres casi desde que nací y la cosa rara de no haberle descubierto en serio como lector de sus poemas hasta hace pocos años. ¡Cómo me gusta oir leer a Antonio y, aún más, que se ponga el delantal teórico y nos cuente por qué es tan importante la poesía! Ahora vivo en Murcia, donde ha sido invitado varias veces, y aquí he podido disfrutarle en compañía de incondicionales.

12:10 p. m.  
Blogger lukas said...

YO tuve la suerte de escucharlo una vez, leyendo sus poemas, era hace tiempo, antes de todos estos premios que lo han puesto a la luz de todo el mundo preocupado por la cultura, era cuando tenía su "Libro de los venenos", me parece, yo lo conocí por unos poemas en la revista Sibila, que creo que sigue saliendo. Es uno de los grandes, desgraciadamente hay pocos, pero como siempre fue...

Y escuché en la radio el programa sobre Aleixandre, y me descubro en el sopor, qué poesía más empalagosa, metafísica, aburrida, altisonante...

10:47 a. m.  

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