lunes, abril 07, 2008

Hace tiempo

De repente, no puedo seguir leyendo, me paro, hay recuerdos, imágenes vívidas del pasado, de una vida que tal vez fue la mía, pero de eso ya no me acuerdo bien, alguien protagonizó las escenas, yo estaba al otro lado del espejo, hay fantasmas como al comienzo de Adam and Eve and Pinch me de Ruth Rendell, yo iba a las películas y disfrutaba, yo me sentaba frente al televisor y no me perdía los dibujos animados, me acuerdo de Pulgoso, cuando veo al perro por la casa, me acuerdo, sueño que hay que meter a un gato en el saco y llevárselo a la otra casa, hay que despejar el escenario para cuando vengan los actores de verdad.

Trato de leer, escucho la radio y suena una música, incluso es Karajan que hoy habría cumplido cien años, pero estoy en otra casa que se parece ligeramente a ésta, pero en la casa irreal hay una vecina arriba que lo llena todo de agua cuando tiende la ropa y le digo a mi hermana que le grite y luego grito yo, me quedo sin voz mientras lo hago, salgo del sueño y entro de nuevo en un cuerpo prestado, hay tiempo de esbozar otro sueño, pero en esto que llega la primera luz y tengo que salir ahí fuera, donde las verdaderas pesadillas, las de carne y ruido.

Voy cerca de las cuadras y hay una venta que dice COCHES DE CABALLOS y hay dos mujeres sentadas sobre la verja y una de ellas me suena su cara y su cuerpo, al final de la espalda tiene un tatuaje mucha tinta azul y una extraña flor y pienso que la tiene que chupar estupendamente y me la imagino en posturas porno, como las putas, en las películas de Taquilla X. Y me gustaría ser su perrillo que olisquea el estiércol y me gustaría tocarle la espalda al final justo cuando la carne se vuelve azul y todo vibra, me gustaría follar con ella pero no sé cómo se lo voy a decir, no puedo acercarme porque hay un cristal y ella está en el otro lado, donde las cosas suceden, yo me quedo del lado de los relatos que siempre mienten, por caridad.

Estoy parado en el arcén, mi padre me llama, yo estoy vomitando, mi madre dice que un vaso de leche caliente, voy a seguir vomitando, todo lo que tengo y lo que no tengo, voy a comprarme ese disco con los conciertos de flauta y de clarinete de Nielsen por Bernstein, voy a irme por el montecillo lleno de lirios, estoy en el cuarto, se me aparece mi padre para decirme algo, siento un calambrazo en todo el cuerpo, el mensaje se ha transmitido, pero cuando regreso a mi cuerpo, no recuerdo nada.

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3 Comments:

Blogger Mery said...

Muchacho, eres genial.

2:40 p. m.  
Blogger Noemí Pastor said...

Hola, veo que te gusta Ruth Rendell. Pues eso tenemos en común. Mi favorita es "A Judgement in Stone" y también me gusta la peli que de ella hizo Chabrol. Saludos.

8:31 p. m.  
Blogger Madame X said...

Escribes de miedo.

X

9:28 p. m.  

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