Solamente
Hasta donde puedo recordar, no he querido nada en el mundo más que la música, pensé, a través de Reger, mirando fuera del museo y dentro de mi infancia. Me siguen gustando esas miradas que penetran en mi infancia, hace tiempo pasada, y me entrego a ellas completamente y las aprovecho tanto como puedo, ojalá no cesaran nunca esas miradas dentro de mi infancia, pienso siempre.(Maestros antiguos, Thomas Bernhard, Alianza Editorial, 1990, p. 32).
Etiquetas: Felicidad posible
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home